La Secretaría de Estado de Cultura de la Provincia, a través de la Dirección de Patrimonio Cultural, realizó la proyección de películas documentales bajo el título: "Ciclo de cine de artistas plásticos”.
Esta propuesta consistió en una selección de filmes autobiográficos de reconocidos plásticos, haciendo un repaso por sus vidas y sus obras consideradas ya, como parte importante del patrimonio cultural mundial.
Las proyecciones se extendieron a lo largo de tres meses, siempre a las 20:00 Hs. en la sede del Museo de Bellas Artes "Laureano Brizuela", sito en calle San Martín 319 de nuestra ciudad capital.
La programación inicial contaba con un repaso por las vidas de: Pablo Picasso, Jackson Pollock, Frida Kahlo, Jean-Michelle Basquiat, Francisco de Goya y Andy Warhol.
PROPÓSITO DE LAS PIEZAS GRÁFICAS:
He tenido el atractivo trabajo de recrear a través de afiches, la promoción de cada una de estas presentaciones. Es entonces que motivado por el tema, elegí una estética donde los rostros se manifiesten a través de rasgos pensados en convertir cada imagen en icónica, usando la fragmentación mediante líneas y colores que ayuden a retener inevitablemente sus perfiles distintivos. En estos rostros hieráticos vemos apariencias faciales sin atisbo de emoción y miradas que no se encuentran con las del espectador, lo que les confiere una impresión de distanciamiento y una entrega absoluta a algún orden de “cosa superior”, ya que ellos en la mayoría de los casos, hablarán a través de sus obras. Un marco blanco bordea el cartel exceptuando su parte alta. Con esto quiero denotar la pretensión de un artista que es la de no tener techo, pudiendo proyectarse (o recibir) dando riendas sueltas a su creatividad.
PROPÓSITO DE LAS PIEZAS GRÁFICAS:
He tenido el atractivo trabajo de recrear a través de afiches, la promoción de cada una de estas presentaciones. Es entonces que motivado por el tema, elegí una estética donde los rostros se manifiesten a través de rasgos pensados en convertir cada imagen en icónica, usando la fragmentación mediante líneas y colores que ayuden a retener inevitablemente sus perfiles distintivos. En estos rostros hieráticos vemos apariencias faciales sin atisbo de emoción y miradas que no se encuentran con las del espectador, lo que les confiere una impresión de distanciamiento y una entrega absoluta a algún orden de “cosa superior”, ya que ellos en la mayoría de los casos, hablarán a través de sus obras. Un marco blanco bordea el cartel exceptuando su parte alta. Con esto quiero denotar la pretensión de un artista que es la de no tener techo, pudiendo proyectarse (o recibir) dando riendas sueltas a su creatividad.
He tomado esta tarea como un sentido homenaje de mi parte a semejantes figuras que, a pesar de lo que pueda adjetivar, están mas allá de cualquier concepto.
Esta entrada está dedicada a una amiga y colega comprovinciana: Natalia Leiva. Dueña de un estilo muy personal de trabajo que con alto grado sinestésico sabe mezclar formas y colores con música y sensaciones.
